Las necesidades humanas básicas, deben constituirse en
derechos fundamentales del ser humano, ya que su posesión y práctica hacen a la
dignidad del individuo y las comunidades. La satisfacción de estas necesidades
implica un marco ambiental sano. A medida que la persona logra controlar sus
necesidades básicas aparecen gradualmente las necesidades de orden superior
-seguridad, familia, salud, empleo, hogar, etc.- hasta llegar a la cúspide de
la pirámide en donde se encuentran las necesidades de autorrealización:
moralidad, creatividad, aceptación, resolución de problemas, entre otras. En
concordancia, la complejidad de las necesidades y los deseos humanos nos llevan
a explorar también el ambiente de la persona, ya que ésta es influenciada por
el entorno, y como resultado, sus deseos se generan desde esa base.
No hay comentarios:
Publicar un comentario